Es cierto que los que tenemos cerca la costa podemos disfrutar de nuestro deporte prácticamente todo el año. Pero en el caso de los que vivimos en el Norte los temporales y el frío hace que muchas veces pasemos largas temporadas sin probar el salitre. Por este motivo siempre he defendido que los entrenamientos indoor son muy importantes para llegar a la temporada en un buen estado de forma y acuaticidad. Normalmente entrenamos nuestra estática, aleteo, tolerancia al CO2 o técnica de aleteo en la clásica piscina municipal haciendo largos de 25 o 50 metros. En este tipo de instalaciones es difícil practicar otras técnicas como la compensación o la adaptación a la presión hidrostática.
¿Pero si te digo que tienes una opción para entrenar todos estos aspectos mucho más cerca de lo que te imaginas?
La opción se llama Marepolis, y esta es la historia de un viaje planificado con mucha ilusión que superó con creces nuestras expectativas.
Espero que te ayude si alguna vez te animas a probarlo. Aquí lo tienes.
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